Entrevista a Claudio Mutti
Hemos planteado algunas preguntas a Claudio Mutti, Director de la revista de estudios geopolíticos “Eurasia”, para un diagnóstico de los conflictos de poder en el actual escenario mundial globalizado, a través del análisis del contexto espacial (este último entendido no sólo en sentido geográfico, sino también social, económico y cultural).
D. – Tras el estallido de las hostilidades en Europa oriental, concretamente en territorio ucraniano, otro frente caliente se ha desencadenado: la referencia es al conflicto entre israelíes y palestinos. ¿Las dos situaciones de guerra tienen rasgos en común?
R. – Un “rasgo común” significativo entre Ucrania y el Estado de Israel radica en que el judaísmo ucraniano ha proporcionado una contribución fundamental al régimen de ocupación de Palestina: será suficiente citar a presidentes y ministros de la entidad sionista como Levi Eshkol, Golda Meir, Moshe Sharett, Yitzhak Ben-Zvi, Ephraim Katzir, Yuli-Yoel Edelstein, etc. etc. Todos de Ucrania. (El Parlamento Judío Europeo también nació a propuesta de la European Jewish Union, fundada por dos millonarios ucranianos de origen judío, Vadim Rabinovich e Ihor Kolomojs’kyj). Además, el mismo Volodymyr Zelensky, nacido de padres judíos convertidos recientemente en ciudadanos israelíes, predijo el 5 de abril de 2022 el futuro de Ucrania al declarar, en una conferencia de prensa, que el país deberá ajustarse al modelo israelí. Ucrania, dijo, “será más parecida al Estado judío que a Europa occidental”; de hecho, tendrá que convertirse en un “Gran Israel”, donde la sociedad estará altamente militarizada y las fuerzas armadas se involucrarán en todas las instituciones. Por otra parte, además, observó “Forbes”, “las analogías con Israel son muchísimas (…) Algunas de ellas han sido analizadas por el think tank Atlantic Council y por numerosos analistas”. De hecho, fue un distinguished fellow del Atlantic Council, el ex embajador de Estados Unidos en Israel, Daniel Shapiro, quien relanzó la idea del presidente ucraniano, pero acompañándola con algunas indicaciones esenciales para su realización. Con Volodymyr Zelensky de Presidente y Volodymyr Hrojsman (también judío) de Primer Ministro, Ucrania se ha acercado aún más a Tel Aviv: en 2020 se retiró de un Comité de las Naciones Unidas, creado en 1975 para permitir al pueblo palestino ejercer sus derechos de autodeterminación, independencia y soberanía nacional, así como el derecho a recuperar sus hogares y propiedades. Por su parte, el régimen sionista envió a sus instructores a Ucrania para la formación militar del ejército de Kiev. En cuanto a la función de los dos regímenes en sus respectivos contextos geopolíticos, tienen en común el papel que desempeñan como puestos avanzados agresivos del Occidente americanocéntrico contra Eurasia. Peón de la estrategia descrita por Brzezinski en el Gran Tablero, Kiev desempeña esta función contra Rusia, mientras que Tel Aviv es desde hace más de setenta años el principal campo de desestabilización y de guerras en el Cercano Oriente.
D – La directora general de UNICEF, Catherine Russell, dijo el 2 de diciembre: “La Franja de Gaza es de nuevo (desde ayer) el lugar más peligroso del mundo para ser un niño. Después de siete días de tregua y de una violencia horrible, los combates se reanudan. Otros niños seguramente morirán en consecuencia”. Continuó así: “Antes de la pausa, según las noticias, más de 5.300 niños palestinos fueron asesinados en 48 días de incesantes bombardeos – un dato que no incluye a muchos niños aún desaparecidos y probablemente enterrados bajo los escombros. Si la violencia vuelve a esta escala e intensidad, podemos suponer que cientos de niños más serán asesinados y heridos cada día”. ¿Algún comentario sobre esta gran tragedia?
“Aniquila a madres y niños. Estos animales no deben seguir viviendo. Extermínalos y no dejes ninguno. Cualquier judío que tenga una pistola debería salir y matarlos”. Estas palabras de un viejo militar israelí llamado Ezra Yachin, difundidas por un video que ha tenido amplia circulación, son representativas de la acción genocida emprendida por el régimen sionista, nacido de las empresas terroristas de organizaciones como la Haganá, El Irgun y la Banda Stern y, de la operación de limpieza étnica que comenzó hace 80 años. El presidente israelí, Isaac Herzog, trató de justificar el exterminio indiscriminado diciendo que los civiles de Gaza eran conscientes de los ataques de Hamás y cómplices de los mismos; el ministro de Salud, Moshe Arbel, declaró que los palestinos heridos y capturados no serán curados; el ex representante permanente de Israel ante la ONU, Dan Gillerman, afirmó que los palestinos son “animales horribles”. “Estamos luchando contra animales”, se hizo eco el ministro de Defensa Yoav Gallant, mientras el parlamentario Ariel Kallner sostuvó que “el enemigo debe ser destruido definitivamente” y otro, Moshe Saada, dijo: “Ya no más operaciones quirúrgicas, corredores humanitarios y operaciones de alerta puerta a puerta”. Giora Eiland, ex jefa del Consejo de Seguridad Nacional de Israel, escribió en “Yedioth Ahronoth” que “Gaza se convertirá en un lugar donde ningún ser humano podrá sobrevivir”. Al fin y al cabo, los dirigentes sionistas citan a menudo como texto paradigmático el Libro de Josué, en el que se evoca en términos épicos la masacre de hombres, mujeres y niños (pero también de bueyes, ovejas y asnos) con la que se inauguró la colonización de la “tierra prometida”.
D. – El Gobierno italiano, desde su toma de posesión, se ha situado en posiciones netamente atlantistas. Así también la Unión Europea. ¿No son estas adhesiones contrarias a los intereses nacionales y europeos?
R. – Después del envío de armas a Kiev y el apoyo al régimen genocida de Tel Aviv, también está la salida de Italia de la Vía de la Seda, la cual corona la acción antiitaliana y antieuropea de uno de los gobiernos más servilmente sometidos a las órdenes de Washington. Por otra parte, las orientaciones del Gobierno Meloni en materia de política exterior, en particular en lo que se refiere a la cuestión fundamental de las relaciones con la superpotencia hegemónica y su cría israelí, eran fácilmente previsibles en el momento de su instalación, el 22 de octubre de 2022. Ocho meses antes, Giorgia Meloni había ido (por tercera vez) a la conferencia anual, inaugurada desde Ronald Reagan en 1974, organizada por la American Conservative Union en Florida; allí se había dirigido a los “queridos conservadores americanos” como presidenta del European Conservatives and Reformists Party, “un partido – explicó – que reúne a cuarenta y cuatro partidos patrióticos y conservadores de Europa y del resto del mundo, incluido el Partido Republicano Americano”, además del Likud israelí. Son estas fuerzas políticas, concluyó, las que representan “la verdadera Europa y la verdadera América”. Por otro lado, el Ministerio de Asuntos Exteriores del Gobierno Meloni fue confiado a Antonio Tajani, quien hasta el 12 de octubre de 2022 fue vicepresidente del PPE, un partido representado en la OTAN Parliamentary Assembly, el organismo que actúa de enlace entre la OTAN y los parlamentos nacionales de los Estados miembros. Tajani fue condecorado por el régimen de Kiev con la Orden de Yaroslav el Sabio, por el “papel desempeñado por el Gobierno italiano en el apoyo a Ucrania”; igualmente indiscutible es el largo y convencido compromiso filosionista del ministro de Asuntos Exteriores, a la que la comunidad judía europea ha dedicado un bosque de 18 árboles en la tierra arrebatada a los palestinos.
D. – Ucrania, Israel, Armenia y Azerbaiyán, Irán, Yemen, Etiopía, República Democrática del Congo y Grandes Lagos, Sahel, Haití, Pakistán, Taiwán, etc… ¿Cuáles son las crisis que deben ser monitoreadas más de cerca en 2024?
R. -Los analistas estadounidenses consideran indispensable frenar el ascenso de la República Popular China, que representa la principal amenaza para el poder mundial de Estados Unidos. Por eso, entre los lugares “caldeados” que usted enumera, yo privilegiaría al último: Taiwán. Esta isla tiene una importancia estratégica fundamental, ya que controla el Mar de la China Meridional, un espejo de agua que no es rico solo en recursos naturales, sino también, es atravesado por un tercio de los flujos comerciales internacionales. La isla se encuentra a medio camino entre la potencia comercial japonesa y el Estrecho de Malaca que, siendo la principal vía de comunicación entre el Océano Índico y el Océano Pacífico, es una de las vías marítimas más importantes del mundo. Sin Taiwán, China no solo está incompleta, sino que se encuentra encarcelada en el Mar de la China Meridional y el Mar Amarillo, amenazada por un potencial “portaaviones estadounidense” que no está a más de doscientos kilómetros de sus orillas. En su informe al XX Congreso del PCCH, celebrado en octubre de 2022, el presidente de XI Jinping dijo: “Taiwán es China. Resolver el problema de Taiwán depende de los chinos y de nadie más”. Es fácil comprender que, si los Estados Unidos se obstinaron en negar a Pekín el derecho de volver a unir Taiwán con la Madrepatria, la situación de crisis que se derivaría sería gravísima.
D. – El presidente de la Federación Rusa ha firmado un decreto para aumentar en un 15% el número de soldados, por las “crecientes amenazas” relacionadas con “la operación militar especial” y a “la continua expansión de la OTAN”. ¿Qué nos depara el futuro? ¿Qué escenarios podrían surgir?
R. – Según el decreto publicado el viernes pasado en el sitio del Kremlin, el número total de personas en servicio en las fuerzas armadas rusas se fijó en 2.209.130, de las cuales 1.320.000 eran militares. Según el decreto anterior, en vigor desde el 1 de enero de 2023, la cifra ascendía a 2.039.758 hombres, incluidos 1.150.628 militares. El Ministerio de Defensa ruso ha declarado que “no está prevista ninguna movilización” y que “El aumento en el número de personal militar de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia se implementará gradualmente con los ciudadanos que expresen el deseo de realizar el servicio militar bajo contrato”. En definitiva, parece que la partida prácticamente ha terminado. A pesar de las pérdidas sufridas y del apoyo masivo de la OTAN al títere de Kiev, la Federación Rusa ha asegurado las regiones de Donbass y ha neutralizado a Ucrania. Sin embargo, gracias al autolesionarse por parte del colaboracionismo europeo, los Estados Unidos han logrado sabotear la alianza energética entre Rusia y el resto de Europa e impedir la simbiosis entre los grandes recursos rusos y la tecnología de las industrias europeas.
D. – Usted coordina y dirige la Revista Eurasia. ¿Quiere hablarnos para que la conozcamos mejor?
R. – “Eurasia” es, como dice el subtítulo, una “Revista de estudios geopolíticos”, cuyo objetivo es promover, estimular y difundir la investigación y la ciencia geopolítica en el ámbito de la comunidad científica, además, sensibilizar sobre las cuestiones euroasiáticas al mundo político, intelectual, militar, económico y de la información. Fundada en 2004, con la garantía de un digno comité científico, “Eurasia” celebró sus veinte años de vida con un número especial, el setenta y tres de la serie, dedicado a la “geopolítica del sionismo”. Además de los análisis geopolíticos o la crítica de las doctrinas dominantes y la ilustración de hipotéticos escenarios futuros, en las casi veinte mil páginas de “Eurasia”, han aparecido también artículos, ensayos y estudios que recogen reflexiones, resultados y metodologías adquiridas en los campos de la etnografía, la historia de las religiones, la psicología de los pueblos y de las identidades colectivas, la morfología de la historia, la sociología, la economía, la ciencia política y la ciencia de las comunicaciones.
Trad. por Francisco de la Torre
Questo articolo è coperto da ©Copyright, per cui ne è vietata la riproduzione parziale o integrale. Per maggiori informazioni sull'informativa in relazione al diritto d'autore del sito visita Questa pagina.